Se transcriben a continuación las Conclusiones de la actividad Cine para la integración. Un cruce de miradas, organizada por el Instituto de Derecho e Integración (IDeI) que tuvo lugar el pasado 20 de Agosto y fue realizada mediante la plataforma zoom.
“Desde el Instituto de Derecho e Integración de nuestro Colegio (IDeI), dado los inéditos tiempos de pandemia que nos impiden la organización del tradicional desayuno de trabajo y del ciclo cultural de cada año, desarrollamos una actividad diferente y posible en este contexto.
Así fue que compartimos el enlace de una película, titulada “Vivir Dos Veces”, para reflexionar, en un encuentro virtual y desde la mirada del cine, sobre los derechos de quienes se encuentran en situación de especial vulnerabilidad y las herramientas jurídicas adecuadas para su protección.
Argumento del film: Emilio, su hija Julia y su nieta Blanca emprenden un viaje antes de que a Emilio le falle la memoria definitivamente, tras ser diagnosticado de Alzheimer. La familia lo acompaña en la búsqueda de un amor de juventud.
La reunión se llevó a cabo vía zoom el día 20 de agosto pasado, con la presencia de 42 asistentes y de la invitada especial profesora Michelina Oviedo. El encuentro dio lugar a un rico intercambio de ideas que sintetizamos a continuación.
Para introducirnos en el film, la profesora Michelina Oviedo señaló que se trata de una comedia romántica que se enmarca dentro de la confluencia entre el arte, la ciencia psiquiátrica y la sociedad. Que la película logra llegar al corazón de la gente mostrando una realidad trágica. Agregó también que el NeuroCine es una actividad que forma parte de un proyecto de divulgación científica donde se puede reflexionar sobre diversos aspectos que rodean a los pacientes con patologías mentales.
Los participantes coincidieron en destacar la empatía que surge entre el protagonista principal, a quien se le diagnostica Alzheimer, y su nieta, que padece una discapacidad motora. Las limitaciones de cada uno les permiten aceptarse y asumir las dificultades propias y del otro.
Se trata de comprender el significado real de la igualdad, la igualdad en nuestra dignidad, la igualdad en nuestros derechos, que solo es posible si aceptamos nuestras diferencias.
A partir de la aceptación se producen las respuestas y se empieza a vivir con las dificultades. La aceptación de la discapacidad es la llave para la convivencia.
También se planteó que frecuentemente el paciente niega su discapacidad. Pero especialmente a los hijos les cuesta más aceptar las limitaciones de sus padres. La hija de Emilio se resiste a aceptar el deterioro mental de su padre, más aún porque era matemático, profesor destacado de la Universidad, una persona muy estudiosa e inteligente.
En ocasiones el cónyuge está mejor preparado para adoptar las decisiones necesarias. En el film el protagonista es viudo y la nieta es quien impulsa el apoyo familiar que necesita para cumplir sus deseos.
Asimismo, se señaló que la película pone de relieve el desprecio hacia nuestra propia vida, deseos y sentimientos. A Emilio se le fue de las manos el amor y la cercanía en la crianza de su hija por darle prioridad a descubrir un número primo.
Entrecruzando la mirada del arte con la del Derecho, observamos como se vulneran los derechos y la autonomía de la persona que padece una situación de discapacidad mental, restándole importancia a sus deseos, a su voluntad. Se la despoja de su calidad de ser humano, de su calidad de sujeto de derecho, se la cosifica. Por ejemplo, ante el ingreso a una institución gerontológica no se pide su consentimiento sino la de los familiares que lo internan.
Se señaló también la importancia de diferenciar la “incapacidad”, una categoría jurídica que depende de las restricciones establecidas por ley o por una sentencia judicial, de la falta de “discernimiento”, una condición natural del sujeto, que se aleja de concepto rígidos y es siempre relativa. Una persona puede tener discernimiento suficiente para ciertos actos y no para otros. La película trata la pérdida progresiva del discernimiento que, a causa de su enfermedad, va afectando al protagonista.
Tampoco puede relacionarse automáticamente la enfermedad mental con la incapacidad jurídica. Así lo consagra claramente la ley.
Desde el punto de vista jurídico se impone desentrañar la voluntad de la persona que tiene un padecimiento mental y respetarla en la mayor medida posible.
El argumento de la película nos lleva a reconocer la importancia de los actos de autoprotección como una herramienta jurídica valiosa para garantizar el respeto a la voluntad del ser humano en el futuro, ante la pérdida de su autonomía. Emilio no fue informado sobre esta posibilidad que le hubiera permitido planificar su vida frente a la inminencia de su enfermedad.
Asimismo, se coincidió en la importancia de que los profesionales de la salud estén al tanto de esta herramienta jurídica para informar a sus pacientes.
Por lo cual se impone difundir el tema entre médicos, enfermeros, terapistas ocupacionales, trabajadoras sociales, psicólogos, psiquiatras y otros profesionales.
Emilio, fue por sus propios medios a un profesional de la salud y, de haber sido informado, podría haber planificado su futuro, para que se respeten sus deseos, pues aún contaba con el discernimiento suficiente para hacerlo, más allá del diagnóstico. Se trata del derecho a ser escuchado y del respeto a la dignidad de todo ser humano.
Agradecemos la participación de ustedes. Un cordial saludo. IDeI”
COLEGIO DE ESCRIBANOS ROSARIO